16 de octubre de 2010

Lo absurdo del egoísmo.

Lo absurdo del egoísmo es que te hace creer que eres mejor que nadie en el mundo, te hace decirlo cada medio segundo, que lo quieras demostrar a la más mínima oportunidad de competencia o conversación. En fin, se vuelve una necesidad tremenda, una necesidad tan dañina como el cigarro. Solos un placer a cambio ¿de qué? es que tu inconsciente te exige que subas mas y mas tu ego y a cambio da una cucharadita de miel, un pequeño placer que te hace sentir bien.

Hasta ahora he podido comprobar que la mayoría de la gente se equivoca pensando que el ego es igual a alta autoestima. Pero es obvio ese pensamiento, en algo se parecen ambas te hacen sentir como un dios, te hacen sentir imparable y muy bien. Por eso yo tendí a creer en algún momento que eran lo mismo. Podría decirte que una persona con buena autoestima, es mil veces más segura que una persona con un ego enorme, alguien con alta autoestima es bastante humilde y sabes este punto me ha costado enormemente, poderlo equilibrar pues las emociones son un verdadero reto. Se necesita de entendimiento y algo de espiritualidad. No quiero que pienses que tú no puedes o que vaya a ser tarea imposible de realizar.
Al comienzo cuando tienes baja autoestima (como yo la tenia) y la quieres subir se comienza a mezclar con el ego. Por eso digo que en la sensación se parecen mucho, pero ya después se diferencian mucho. Alguien con buena autoestima es alguien bastante humilde y si en estos momentos recuerdas a alguien que conozcas con mucho ego, veras que lo que menos le sobra es humildad. Por el contrario. Solo quiere demostrar todas sus capacidades a la primera vez. La gente se da mucha cuenta cuando tiras toda la carne a la parrilla o cuando prefieres dosificar, sin necesidad de contarle al mundo entero que eres tú el dueño de la carnicería.

Así que por conclusión nunca reemplaces ni la confundas ego por autoestima.

Te contare un secretillo, yo era una persona con bastante ego y muy poca autoestima. Tenía consciencia de que poseía un conocimiento para mi edad alto y poco común, que era alguien más espiritual, que portaba mucha simpatía y carisma. Eso me hacia tener arto ego. Pero no me sentía para nada útil y esto me hacia tener poca autoestima.

Y bueno el otro día tuve una revelación, fue como un flash. Estaba con mis amigos y de pronto uno de ellos quiso comenzar a cantar e improvisar una canción, le cambió mucho la letra y era como tener un payaso al lado, todos estábamos muerto de la risa. Pero aquel contenido de la canción estaba dirigido para molestar a otro amigo allí presente (todo bien gracioso).

La verdad lo que me impresiono fue la facilidad con la que mi amigo se puso a cantar e improvisar y lo segundo que me dejo con la boca abierta fue la capacidad de mi otro amigo para aceptar todo tipo de “burlas” con un gran sentido del humor y ver como también él disfrutaba, fue un golpe para mi consciencia, en ese momento analice que yo ni en mis sueños hubiese actuado como ellos dos, por mi reciente timidez que aun me hace difícil poder hacer el loco y por el poco sentido del humor que tenemos cuando nos molestan tantísimo rato. Fue allí cuando entendí y tuve una buenísima revelación, todos somos iguales, nadie es mejor que otro, absolutamente nadie. Al comienzo me creía mejor que ellos (internamente), pero sus excelentes desempeños me dejaron atónita. Ellos son muy pero muy buenos en ese ámbito de su vida social y yo tengo también mis deficiencias en ese campo, pero estoy fortalecida en otros.

Pude dejar de lado mi ego y darle paso a la humildad que desde ese día a crecido en mi, pues me tenía un poco inquieta el no poder ser verdaderamente humilde.
Lo absurdo del egoísmo, llega a tal punto que te desconfigura todo tu sistema y lo moldea a su estilo. La gente por culpa del ego, se pelea, no es capaz de escuchar, lo más importante y que engloba todo, no es capaz de ni por un solo segundo parar su caminar, mirar a la gente y pensar (imaginar) que cada persona tiene muy buenísimos talentos, esto quiere decir pensar en los demás como personas de mucha importancia. No serán los mismos talentos y aptitudes tuyas, ni los mismos míos. Pero al fin y al cabo son tan respetables que eso debe hacerte pensar y decir que tú no eres ninguna persona de otro planeta a quien deban de obedecer siempre.

¿Vez? A esto me refería anteriormente en el párrafo anterior cualquier persona lo puede confundir con baja autoestima e infravalorarse y es por esto que cuesta llegar al buen equilibrio de poder reconocer lo genial que eres como persona (o en el área que desees) pero este sentimiento no debe repercutir para que digas que no existe persona tan buena como tú.
Lo que yo hice al comienzo es intentar subir mi autoestima, sin importar que subiera mi ego más de lo normal. De hecho así fue, como en este camino (cambio) no tenía idea donde iba pisando lo hice lento pero a pasos firmes y una vez que ya sentía más amor por mí. Comencé a bajar solo el ego. Para así hacer una buena balanza.

En este post no he querido extenderme demasiado con el tema de los dos tipos de egoísmos, positivo y negativo. Imagino que sabes lo bueno de tener cierto ego solo recuerda esto “sin ego no hay motivación”.

pauly

No hay comentarios: